Resumen del proyecto

¿Qué pasa cuando el amor se agota pero el archivo sigue vivo en la nube? ¿Cómo son las ruinas digitales? En uno de sus textos Hannah Black se pregunta qué es lo que queda cuando el amor se acaba. Estas piezas audiovisuales son la retransmisión de lo que queda, una representación de lo que fue verdad. La forma de trasladar esa intimidad concreta y de su archivo para ser asumido. El archivo en la actualidad ya no se presupone como un concepto físico, ahora es cualquier cosa en la nube, o en una carpeta en tu ordenador o móvil, convivimos con herramientas para localizar momentos, recuerdos o enlaces. Una verdad completa es la representación del autómata en el que estamos siempre apunto de convertirnos, incluso en la mayor tensión emocional posible. Su versión digital está compuesta por tres archivos audiovisuales que reproducen una conversación amorosa vía WhatsApp, y su versión física es la impresión de ésta conversación sentimental en rollo de ticket de principio a fin.

Una verdad completa se apropia de recursos al uso que forman parte de nuestra cotidianidad en internet, como el empleo del asistente personal para la narración de la conversación, la captura de pantalla para recoger en su totalidad la conversación (dónde con detenimiento, y a través de la grabación de pantalla del espectador podría leerla entera), y finalmente la representación en vivo de la conversación, asumiendo los espacios muertos de espera entre mensaje y mensaje, entre que uno está en línea, escribiendo o a la espera de ser leído o responder. Esta pieza digital se interesa por la evolución de lo emocional en las plataformas digitales. O de la posibilidad del vínculo emocional, la posibilidad del amor, y cómo nuestra identidad se construye y deriva entorno a internet.

Autoría

Livia Daniel (1989) es una artista Alicantina residente y activa en España. Después de estudiar Bellas Artes en la Universidad de Granada, desarrolló un interés por la evolución de lo emocional en las plataformas digitales. O de la posibilidad del vínculo emocional, la posibilidad del amor, y cómo la identidad femenina se construye y deriva entorno a ello. Su resultado se presenta, generalmente, cómo instalación: a estrategias de apropiación y descontextualización. Livia, basa su trabajo en un fuerte cuestionamiento personal y contextual, reflexionando sobre lo que sucede, lo que se construye y deconstruye. Habla de lo que vive y su obra indaga en lo vivido, de forma sistemática. Ha vivido en Varsovia, Barcelona, Londres, Valencia y Bruselas, pero en la actualidad reside en Granada, dónde está desarrollando su tesis doctoral. Recientemente ha presentado su última exposición individual en el programa Facba ‘nada dura lo suficiente para ser verdad’ y publicado un artículo sobre voyeurismo digital en la revista Pathetica.